
Culiacán, Sinaloa.- Ante el evidente riesgo en el que se encuentra Sinaloa por sismos y prueba de ello, el reciente temblor suscitado el pasado 23 de septiembre de 4.6 en la escala de Richter, la diputada del Partido Sinaloense, MC. Angélica Díaz Quiñónez anunció en tribuna que el Grupo Parlamentario del PAS presentó una iniciativa con el objetivo de reformar la Ley de Protección Civil, a fin de promover la instalación de sistemas de alarma audible y visible conectados al Sistema de Alerta Sísmica de Sinaloa, en puntos de la entidad geográficamente estratégicos y de afluencia masiva, con el fin de prevenir a la población en caso de un sismo.
Además se propone que el Instituto de Protección Civil lleve a cabo acciones y proyectos para la promoción de la sismoresistencia en las infraestructuras de la entidad.
Díaz Quiñónez recordó que años atrás, desde el 2008, en Sinaloa han ocurrido sismos con las mismas características, por lo que, tanto ella, como el Diputado Víctor Antonio Corrales Burgueño proponen acciones que deben llevarse a cabo para prevenir cualquier desastre, como lo son: La instalación, de al menos, 4 estaciones sísmicas que permitan monitorear estos movimientos. Realizar estudios de microzonificación sísmica en el estado.
Además de efectuarse estudios de peligrosidad sísmica y evaluar la seguridad de los edificios altos, públicos y privados, como lo son: hospitales, escuelas y puentes. Implementar planes de emergencia sísmica y programas de capacitación constante de personal de protección civil y a la población.
También proponen crear un reglamento específico para las construcciones en cada municipio de acuerdo a los estudios que para tal efecto se realicen y proveer en los hospitales públicos y cuerpos de emergencia como Cruz Roja, Bomberos y Protección Civil, de infraestructura y tecnología adecuada para reaccionar de manera eficiente y eficaz ante los sismos.
La diputada PASista dijo que lo anterior es de suma importancia, ya que debe trabajarse en actualizar los reglamentos de construcción y de obra pública, que prevean el diseño y uso de materiales y estructuras que puedan soportar sismos de una escala superior a los que se han tenido.
«La historia de México nos dice que no debemos esperar a que ocurra un desastre, como de manera lamentable ocurrió el 19 de septiembre de 1985; por ello, los culiacanenses y, en general, los sinaloenses, debemos prepararnos para enfrentar un sismo de mayor magnitud que pudiera convertirse en una catástrofe. Ojalá pudiéramos afirmar que eso nunca va a pasar, pero los hechos del pasado miércoles nos demuestran que puede ocurrir lo contrario, como lo dijeron diversos expertos que salieron a dar su opinión después de que ocurrió este temblor, pues según el sismólogo Leobardo López Pineda en su artículo “Riesgo sísmico en ciudades del noroeste de México”, ubica a las 15 ciudades con mayor peligrosidad en caso de un terremoto y entre ellas está Culiacán».