Venecia.- Un delfín bautizado como Mimmo por los venecianos, se ha convertido en una presencia habitual pero preocupante en las concurridas aguas de la laguna de Venecia. Aunque su presencia encanta a locales y turistas, las autoridades y expertos han lanzado una alerta para protegerlo de los peligros que representa el intenso tráfico de embarcaciones.
El delfín mular, de la especie tursiops truncatus, fue visto por primera vez en junio y desde entonces ha sido avistado repetidamente en la cuenca de San Marcos, una de las zonas de navegación más transitadas de la ciudad. A pesar del ruido constante de motores y hélices, el animal parece haberse establecido en el lugar.
Reuters
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Luca Mizzan, responsable del museo, expresó su perplejidad ante la decisión del animal en un video.
“Desconocemos por qué un delfín decide acceder a un lugar con tanto tráfico, porque a buen seguro el ruido de los motores de los barcos y las hélices le molestan, pero se ha quedado”.
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Aunque Mimmo parece estar en perfecto estado de salud y ya había sido detectado en julio en uno de los accesos a la laguna, su permanencia en un ambiente tan hostil mantiene en alerta a las autoridades. La Guardia Costera sigue de cerca los movimientos del delfín y ha pedido a la población que reporte cualquier avistamiento en zonas diferentes a las ya conocidas, como San Marcos, la Giudecca o la isla del Lido.
La situación presenta el dilema de disfrutar de una visita inusual de la vida silvestre mientras se prioriza la seguridad de un animal que, por razones desconocidas, ha elegido un hogar inesperado y lleno de riesgos.
